20 septiembre 2007

Hoy no tengo pena

Pues sí, hoy no tengo pena ninguna. Esta semana pasada entre los preparativos del evento infantil, la vuelta al cole (la mía, digo) y ciertas revisiones médicas de mí misma andaba apesadumbrada, pero ahora ya no. Se me han quitado todas las penas.

Para no meterme mucho en faena, que luego me llamais exagerada, os diré que tenía que andar lo menos cuatro meses de pruebas y pasar por un quirófano, con actuación estelar de una aguja de *30 centímetros 30* incluida.

Pues ayer fui a mi médico de toda la vida y me dijo tres cosas muy instructivas. Uno, que si me mandaba todo eso a él lo echaban del directorio médico de mi seguro; dos, que de todo eso la mitad estaba repetido, que son pruebas que ya me han hecho a lo largo de la historia de la Humanidad varias veces, porque como soy tan rara no saben qué coño me pasa y todos acaban pidiendo lo mismo; tres, que si yo quería o estaba dispuesta a hacerme todo eso. Como no me lo suelen preguntar, yo fui honesta y le dije que ni de coña, que a mí me pueden contar la copla del romero y la carreta, pero que las agujas de caballo estoy yo harta de verlas. Dicen que no te enteras, pero que le tiemble el pulso al tío y no veas qué estropicio te hacen. Amos, que ni de casualidad. Que las de sangre se las saben de memoria, que un mes sí y otro también me toca pasar por el vampiro, que no sé si llamarle chupóptero o rejoneador, porque según quien te toque te meten la aguja en el brazo que parece que entran a matar, no me jodas. Que las de inmunidad (tétanos, verbigracia) me las han puesto tantas veces que hasta se deben de acordar de mi cara, porque en un curro que tuve hasta me decía el jefe que un día iba a tener que venir con armadura a trabajar... Que la toxoplasmosis, rubeola, etc, ya me las han hecho cuando me quedé en estado de buena esperanza de mi preciosa réplica (si es que mi niña es como yo pero en pequeño), y de lo demás la Cruz Roja sabrá, porque soy donante de sangre y si tuviera algo chungo ya me hubieran tirado de las orejas debidamente por no informar. Por cierto, desde aquí quiero decirle al señor Arzallus que sepa que soy mucho más vasca que él siendo yo natural de Madrid, porque su grupo sanguíneo es A+ y el mío, O-. Por chulo.

Me perdonan ustedes pero esto no me puedo resistir a decirlo, porque mi marido sí es vasco, no nacionalista para más señas, antieta y antibatasuna, y le vienen a decir todavía algunos gilipollas que él es un maqueto porque es A+. Bueno, pues yo más papista que el Papa, y a ver quién me tose ;oPPPP

Después de este inciso, y como mi doctor -y sin embargo amigo- me lo puso en bandeja, llegamos a un acuerdo bilateral en virtud del cual rompí allí mismo el medio kilo de papel en volantes que llevaba, el hombre se descojonó de risa porque ya me conoce, y me dijo que eso sí, ya me podía poner en serio a ser una sex-simbol de nuevo porque esto mío no puede ser, y que con eso y alguna hormonilla que otra lo mío estaba más que subsanado, titi. Me encanta que mi médico me entienda ;o))))

Y por cierto, desde aquí os recomiendo a las chicas públicamente y con todo descaro al Doctor Petrit Dibra, Tocoginecólogo, hombre tranquilo y comprensivo, y el mejor especialista que he tenido el placer de conocer. Por la cara, y porque me cae bien el tío. Bueno, y porque a la hora de parir dijo que había hecho ya seis cesáreas ese día y que no le daba la gana de hacer otra más, que me lo montara como quisiera pero tenía que sacar a mi hija a pulso. Menos mal, porque luego descubrimos que me dan alergia los puntos, y que tenía atrofia en el útero, de modo que hubiera pasado un año hasta recuperarme de la maldita cesárea. Vamos, que es un médico cojonudo y no me ha regañado en la vida, lo cual y para quien me conozca en persona sabe que ya es mucho decir ;o)))))

Ayer iba de médicos malos, y hoy toca hablar de buenos. Es por el equilibrio universal, y porque este hombre me ha evitado unas cuantas punciones ováricas bajo anestesia general, seis análisis de sangre, medicamentos a gogó para afianzarme la úlcera de estómago incipiente, pruebas de glucosa y no sé qué más, y le estoy muy agradecida, que bastantes perrerías llevo ya en el cuerpo.

Pues hala, a ponerse cañón. Eso sí, hasta que me abran el gimnasio del Distrito C conmigo que no cuenten, que hasta enero tengo un cumpleaños detrás de otro ;o))))))

La vida es maravillosa en su inmensa y universal sabiduría ;o)))))

4 comentarios:

Anónimo dijo...

A mí con Petrit no me fue nada bien. Me quería hacer una cesárea sin haber indicación de cesárea. Por esta razón me tuve que cambiar de gine en la semana 38, a puntito de dar a luz, porque me programaba cesárea y no me parecía justificado. Me fui a la seguridad social, donde me dijeron que no me hacía falta cesárea y que mi caso era para parto vaginal, y finalmente fue parto vaginal. Petrit me exageró bastante los riesgos del parto vaginal con cesárea previa (que el útero se rompe muchísimo, que el riesgo es elevadísimo, que el útero es como papel de fumar ky que los partos vaginales con cesárea previa ya no se hacen en ninguna parte, cuando eso no es cierto porque en la SS se hacen por sistema en muchos hospitales).

Me mintió, ya que ni el riesgo es elevadísimo, ni el útero es como papel de fumar, ni se rompe muchísimo, ni es cierto que no se haga en ninguna parte (mismamente en unos cuantos hospitales madrileños públicos se hace por protocolo). Me sentí engañada, me quería llevar a cesárea como fuera. También me dijo que mi hija estaba muy alta y no podría nacer vaginalmente (cuando todo el mundo sabe que los segundos puede no encajarse y en el parto salir perfectamente). La niñla nació por parto vaginal en la SS.

Me alegro de que tu experiencia con él sea buena, la mía desde luego no lo fue.

Gesmida dijo...

Hombre, ya sabes como es esto, cada uno habla de la feria según le va. A mí personalmente me ha hablado con total honestidad, y me explicó todo suavizándome lo más fuerte, porque dice que "siempre estás nerviosa, siempre estás agobiada", y tampoco me quiso contar por qué me adelantaba el parto para que no fuera más intranquila todavía al paritorio. Yo creo que ellos te cuentan las cosas en función de lo que vaya a resultar mejor para la madre y el hijo, que si hay riesgos no te los van a negar pero que tampoco te van a mentir. También es cierto que en la privada pro sistema quieren hacer cesárea y en la pública, parto natural, por la razón evidente de las pelas, pero si te dijo que había riesgo de que se rompiera el útero... él sé que no miente, porque a mí me podría haber sacado pasta por un tubo con la reproducción artificial, y no lo hizo, me explicó clarito cómo iba el tema y yo elegí. Lo tuyo, pues no sé, será mala suerte. Yo desde luego sólo le conozco de las consultas, pero es amigo de la familia, y a mí no me anda otro ginecólogo ni con la Guardia Civil delante ;o)

Siento mucho que tu experiencia fuera tan negativa, y más tan cerca ya de dar a luz.

Un saludo ;o))

Anónimo dijo...

pues yo tengo dos niños y a mi siempre me ha ido estupendamente, estuve probando con un medico tras otro en mi primer embarazo y sin duda no me arrepiento de la elección que hice!

Anónimo dijo...

A mi tampoco me ha ido nada bien con Petrit. Me pasó exactamente lo mismo: desde la semana 37 empezó a intentar convencerme de que teniendo una cesárea anterior había mucho riesgo de tener un parto vaginal, incluso con condicienes favorables; lo mismo, que el útero es como papel de fumar, que la herida se puede abrir siendo muy aparatoso y provocando incluso la muerte del bebé y/o de la madre, etc y que si tuviese condiciones desfavorables ni pensarlo, cesárea segura. Ya me iba diciendo que mis condiciones no eran buenas, pues la niña estaba muy alta (igual) y aun quedaban 3 semanas! podía bajar!luego me dijo que era muy grande.. el caso era ir poniendo excusas. lo último ya fue con mi último monitor, que dijo que como había una desaceleración puntual (algo normal según el médico que me puso el monitor y según los gines de la ss, debido a la postura de espaldas en lugar de de lado), podía ser por vueltas de cordón, que corría riesgo, que podía tener sufrimiento fetal incluso morir el bebé!! y me habló de un parto que tuvo que hacer esa misma noche y el bebé venía muerto por vueltas de cordón (algo que no me parece muy ético)estaba claro, que como nos veía muy reacios a la cesárea, nos quería meter miedo! no me asustó mucho, pues ya le veía venir, pero algo sí, así que me fui a urgencias de la ss y me tranquilizaron totlamente, diciendo que ese monitor estaba perfecto y después de hacerme todas las pruebas pretinentes podía esperar tranquilamente a ponerme de parto, pues tenía unas condiciones muy favorables (lo contrario a lo que me decía él).
Así que me cambié radicalmente, y no quiero saber nada del doctor Petrit, pues me parece tener muy poca ética y ser muy poco profesional, hacer lo que hizo, engañarme y mentirme para conseguir una cesárea!! al principio, cuando me la quería "meter por los ojos", pensé que sería su opinión, que él vería un riesgo grande, aunque me informé y no era así, siempre tiene mucho más riesgo una segunda cesárea que un pvdc, pero bueno, respetaba su opinión; pero ya llegar a hablarme de muerte de mi bebé por mi última monitorización, me parece fatal, y de no ser buena persona, o eso o que realmente no es tan buen médico y no tiene ni idea de entender una monitorización!
El caso, es que afortunadamente me he dado cuenta a tiempo, (ya estoy en la semana 39!) y mi hija nacerá en la ss, y si es por cesárea, que sea porque tenga que serlo, no porque a este señor le apetezca, hacerlo en su día de guardia, porque, si tan urgente era sacar a mi hija, ¿por qué no me hizo la cesárea ese mismo día?? ¿por qué al jueves se podía esperar?? curiosamente es el día que él está de guardia....
Me alegro de que a los demás os vaya bien, a mi me habían dado buenas referencias, y me parecía un buen profesional durante todo el embarazo, pero está claro que en esto no lo ha sido!
Saludos