28 septiembre 2007

El Hagakure

Soy una pesada, lo sé y lo reconozco. Pero es que me da por temporadas, agarro un tema y no lo suelto hasta que lo he exprimido del todo, qué le voy a hacer, así funciona mi cerebro pervertido por tanto ejercicio ;o)

Hoy toca una reflexión que se llevan haciendo los filósofos desde la época de la Grecia clásica. Vamos a poner algunos instructivos ejemplos:

Los jóvenes hoy en día son unos tiranos. Contradicen a sus padres, devoran su comida, y le faltan al respeto a sus maestros.

Sócrates (470 AC-399 AC) Filósofo griego.


Los jóvenes de hoy no parecen tener respeto alguno por el pasado ni esperanza ninguna para lo por venir.

Hipócrates (s. V AC-s. IV AC) Médico griego.


Estos son malos tiempos. Los hijos han dejado de obedecer a sus padres y todo el mundo escribe libros.

Marco Tulio Cicerón (106 AC-43 AC) Escritor, orador y político romano.

Me encanta lo de los libros, jejeje. Pero donde quería llegar es a lo de la corrupción de la juventud, tan de moda ahora. O sea, que el tema es nuevo... De ayer mismo. Y recordaba esto a cuenta del Hagakure, un libro sobre ética y conducta para samurais, concretamente este apartado:

Como ha de ser el samurai

Tengo la impresión de que los jóvenes Samurais de hoy en día se han fijado objetivos lamentablemente bajos. Tienen la mirada furtiva de los ladrones. La mayoría sólo busca su interés personal o hacer gala de su inteligencia. Incluso los que parecen tener el alma serena sólo muestran una fachada. Esta actitud no es conveniente.


Esto se escribió en el siglo XVIII y en Japón, lo que creo que demuestra la universalidad de la cuestión a lo largo de los tiempos y en todas las culturas y naciones. Y lo mejor es que el discurso no ha variado nada en los últimos 2500 años -que sepamos- de modo que: o bien llegando a adultos siempre creemos que los jóvenes no tienen futuro, o es que realmente la sociedad no camina más que en círculos y fuera de los descubrimientos científicos, el ser humano no avanza como especie.

Yo personalmente creo que es lo segundo, porque tantos millones de pensadores no pueden estar equivocados, y la envidia, la codicia, la cobardía, la insolidaridad, y todas las otras características definitorias de la conducta del ser humano y causa de la mayoría de sus males, continúan presentes en nuestra especie, tal y como ocurre desde hace milenios. No es una perspectiva halagüeña, la verdad, pero siempre cabe la posibilidad de que algo cambie. No lo digo con mucha convicción, pero es que tengo una hija por criar y no me puedo poner derrotista porque me comen por los pies, así que a por ellos, que son pocos y cobardes.

Como afirman algunos científicos de reconocido prestigio, el género humano es el mayor error de la Creación, pero qué le vamos a hacer, uno no elige nacer. Mientras sigamos por aquí voy a procurar, en la medida de mis posibilidades, que mi contribución a las futuras generaciones no sea una voraz ave de rapiña, ni una consumada depredadora social, ni se convierta en una tirana mundial. Yo creo que con esto y un par de retoques, por mi parte yo ya he cumplido ;o)))))

La vida es maravillosa cuando se ven los toros desde la barrera. ¿A que sí? ;oP

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buahhhhhh... El hecho en sí de que te hayas leído el Hagakure ya me parece una pasada... Mira que pensaba todo este tiempo que yo leía cosas raras... y resulta que no lo son tanto.

Pienso más o menos como tú: siempre he dicho que mi mayor "reto" como futuro padre que aún no soy, es que mis hijos aprendan a distinguir el bien del mal. Porque teniendo clara esa base, ya será su voluntad la que forje su carácter. Pero no creo que la juventud sea "malvada" per se... Creo más bien que quien lo permite -con Dios sabe qué intereses ocultos- es quien crea esos "monstruos".

Cultura y educación son las bases para que esto no suceda. Espero saber dárselas a mis hijos y poder ofrecérselas como el tesoro más preciado, porque a mí -y no soy ningún santo- creo que me han servido bastante.

Lo de madurar... en fin, es harina de otro costal ;D

Gesmida dijo...

Además de verdad ;o) Pero yo no dejo de preguntarme si esto ha sido así siempre. Ayer se estaban metiendo mano salvajenmente unos chavales en el parque donde juega mi hija, les llamé la atención y el tío no dijo nada, pero ella me llamó "hija de puta" a la primera de cambio. Menos mal que soy una madre leona ;oP