02 noviembre 2010

Culo de mal asiento

Holaaaaaa, ¿qué tal todo? Yo divinamente, tengo que decir que soy feliz. Tengo un marido que me quiere, una niña preciosa y más lista que el hambre, un trabajo... Bueno, lo del trabajo quiero decir que lo seguiré teniendo, pero que será otro ;o)

Qué queréis, si es que soy culo de mal asiento. Desde que fluyo con el Universo y no me aferro a las cosas me va mejor, pero si me surge un trabajo nuevo me apunto, y si hay mala energía dejo que el Destino me ponga a tiro otra cosa. Qué le voy a hacer, me he comprometido con una filosofía de vida.

Tampoco se trata de salir de estampida a la primera de cambio, sabe Dios que tengo un aguante tremendo, pero lo que no va, sencillamente no va. La diferencia es que antes me quedaba porque me daba reparo, sufría en silencio y acababa por irme igual pero jodida. Ahora al más mínimo síntoma de incompatibilidad comienzo a plantearme el futuro.

Hasta mi acupuntora dice que no tiente más a la suerte, que tiene cantidad de pacientes en paro que no encuentran nada y yo cambiándome cada dos por tres de empresa. Pero si es que me surgen las oportunidades... será que yo tengo un sino diferente, o que tengo mejor fortuna, o qué sé yo, pero me salen las cosas más o menos redondas sin grandes preocupaciones.

Creo que ahí está la clave. Como ya no me preocupo y confío en el Futuro va todo rodado. Ya lo podía haber descubierto antes :o// Ojo, no digo que esto le sirva a todo el mundo, pero a mí de momento me funciona bien. Respirar, sentirme parte de la Humanidad, de la Tierra, y dejar que el destino me guíe hasta mi próxima misión. Yo creo que todo lo que hacemos en la vida tiene un propósito: tienes que estar exactamente en el lugar que estás. No sé si es por la gente a la que tienes que conocer, o cómo influyes en el entorno, o cómo influye el entorno en ti, pero las cosas siempre salen como deben, aunque a veces nos parezca una putada, como en el cuento del pájaro y el elefante. ¿No lo conoces? Más o menos viene a decir que un pobre y pequeño pájaro se arrimó a un elefante para quitarle los parásitos, pero se despistó y el elefante le tiró encima un cagarro de los suyos que lo dejó enterrado. El pájaro debía estar pensando "qué putada, enterrado en la mierda", pero pasaron por allí un grupo de depredadores y no se acercaron a la montaña de desperdicios del elefante. Moraleja: no siempre quien te hace un favor te ayuda, no siempre quien parece que te jode te perjudica.

Pues eso es lo que hay, y yo me lo creo totalmente.

Por cierto, ha sido mi cumple ;o)) 35, por el culo te la hinco, jejejeje.

Un beso a todos, y un trozo de pastel dietético para quien quiera -luego no me culpen de los aumentos de peso ;o)))

La vida es totalmente maravillosa ;o)

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