18 octubre 2010

Sólo se me ocurre a mí

¡Hola, gente! ¿Cómo os trata la vida? Yo estoy bastante tranquila, porque curro como una mala bestia y llego a casa desfogada y feliz, que en principio parece una faena pero en mi caso es una bendición.

Veréis, os expongo mi caso: Llevo con el piso en venta como 3 años, y no hacían más que llamarme los curiosos o los vecinos de la zona para ver cuánto pedimos. Al final me harté y especifiqué en el anuncio que rebajo el precio a quien de verdad le interese y pueda dar una señal para venderlo rápido y que no se me eternice... Mucha gente empezó a llamar y a venir a verlo, a todos les gusta pero estamos en general bastante tiesos, así que ninguno cuaja. Hoy me ha llamado una inmobiliaria, que a mí me dan grima por las experiencias tan malas que he tenido con ellos, pero como ahora fluyo con el Universo he decidido que les voy a dar una oportunidad de limpiar el nombre del gremio.

Y vosotros diréis "Qué ilusa", pero es que las ocasiones se presentan en la vida por un motivo. He pensado que igual ahora es el momento, porque si llega el final del año y no lo hemos vendido nos quedamos con él hasta que la cosa mejore, o alguien en su sano juicio vuelva a considerar que invertir en una casa deja menos renta disponible que si no lo haces.

Pero es que ahora que lo pienso... andar otra vez con el trasiego de gente entrando y saliendo de la casa, y el "me gusta mucho pero rebájamelo que no llego", y la negociación de las famosas comisiones... De verdad, que sólo se me ocurre a mí fluir :o//

Espero que sea para bien, pero no sé por qué me da en la nariz que en un par de meses estaré en este mismo blog poniendo a parir a los de la inmobiliaria. Dios dirá, y ojalá que me equivoque.

La vida es maravillosa siempre, pero vendiendo tu casa más.

1 comentario:

mudito dijo...

Enhorabuena, un blog lleno de vitalidad, y no, no voy a pedir un link a mi blog jeje.
Una experiencia propia con una inmobiliaria: no nos ha querido enseñar un piso, tal cual. Hemos tenido que conseguir el teléfono de la dueña por nuestra cuenta para poder verlo.
A un amigo intentaron venderle un piso sin tener un contrato firmado con el dueño, incluso le cogieron la señal y trataron de endosarle otros pisos.
Por cierto, lo de las tíldes suele ser la configuración del idioma, debería estar en español tradicional.